Cansado de su aburrida existencia Miles de 16 años decide cambiarse a un colegio internado para ir en busca de lo que el poeta Rabelais llamó el Gran Quizás. Ahí su recién descubierta libertad y una enigmática chica Alaska lo lanzan de lleno a la vida. Cuando Miles siente que está por alcanzar su objetivo, una tragedia inesperada amenaza con arrebatárselo. Una novela escrita con agudeza y humor en la que la intensidad de la amistad puede terminar en una perdida devastadora.
Miles es un chico que no tiene muchos amigos, siente que no le pasa nada interesante y por eso decide irse al internado de Culver Creek. Allí conocerá a El Coronel, Takumi y Alaska. Se siente profundamente atraído por ésta pero ella tiene novio, además de tener actitudes muy cambiantes (un día está coqueta, al otro en una crisis de nervios). En el internado vivirá miles de aventuras con sus nuevos amigos y conocerá el amor.
Yo no le tenía mucha fe a John Green porque me había dejado llevar por comentarios de gente a la que no le gustan sus libros. Pero me equivoqué terriblemente. El libro me encantó. Me sentí identificada con Miles, creo que todos tenemos un perdedor interior (a veces no tan interior).
Aunque Miles hacía muchas cosas para agradar y poder tener un círculo de amigos, es entendible. Además estaba enamorado de Alaska, una chica muy problemática con vicios peligrosos.
Alaska es un personaje totalmente diferente a los que estamos acostumbrados. Como ya dije antes, tiene una personalidad muy cambiante. Y eso nos mantiene en vilo, esperando saber porqué es así, qué la lleva a hacer las cosas que hace. Tiene un pasado malo que en parte justifica su forma de ser, de todas formas no nos enteramos al cien por ciento el porqué.
Tenemos la pequeña esperanza de que Alaska empiece una "relación" con Miles, aunque no sé como sería factible dentro de la historia, pero tenemos la esperanza. Tienen una amistad muy particular, los dos coquetean pero al fin, son muy buenos amigos.
La mejor relación es la de Miles con El Coronel, en una parte Alaska los describe como "una pareja de ancianos casados" y realmente es así. Tienen momentos divertidísimos, se complementan excelente y se apoyan el uno al otro en todas las situaciones.
Los personajes están bien desarrollados, y la historia no deja cabos sueltos (excepto el del final). Podemos ver el desarrollo de Miles a lo largo del libro, que empieza siendo un chico tímido y termina siendo seguro de sí mismo.
Hay muchas situaciones hilarantes y graciosas a lo largo de la lectura, como también hay muchas que son tristes y otras que nos dejan pensativos.
El libro me encantó. Fue una lectura fresca, rápida y adictiva. Nos hace reflexionar sobre nuestras vidas y la forma en las que vivimos, nos ilustran con maravillosas últimas palabras de gente muerta y de paso nos dan lecciones de religión (no solo el catolicismo) pero no se tornan pesadas. Alaska es un personaje muy misterioso e interesante. La historia tiene un gran punto justo a la mitad del libro donde cambia todo y nuestros personajes tienen que convivir con ello. Muy recomendable y sin duda me leeré otro libro de John Green.
Un libro excelente, me fascinó y me mantuvo leyendo hasta altas horas. |
Este libro lo leí gracias a la propuesta de lectura conjunta de mi bella madrina Esther del blog Sweet Dandelion. Si quieren unirse, todavía hay tiempo hasta el 4 de febrero (son poquitos días pero seguro se lo leen al instante, es muy enganchante -sí, lo sé, no existe esa palabra-)
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En unos días ya subiré las entradas, no los quiero agobiar.
Un beso enorme y...